La venta de aceite de oliva desde el inicio de la campaña el mes de octubre hasta el pasado mes de agosto, registró un descenso del 13,78% según los datos manejados por los envasadores integrados en la patrona Anierac cuyos socios aglutinan el 80% del mercado. Frente a una bajada del 12”% de los aceites virgen extra y del 20% de los aceites de oliva suave e intenso, la nota destacable es el incremento del 12% en la venta del aceite virgen, una calidad intermedia entre el extra y los de calidad más inferior refinados. La subida de los precios casi en un 50% por las dos bajas cosechas provocadas por la sequía ha sido las razones de este descenso que se repite en el aceite de girasol donde por la baja cosecha y la necesidad de acudir a las importaciones de países del este como Ucrania o Rusia, también subieron los precios y la demanda cedió casi un 8%, un 22% el aceite de colza y un 46% el de soja cuya demanda ya era muy escasa, 3.000 toneladas de colza 1.200 de soja, lo que a la postre señala al aceite de oliva en la demanda de los consumidores españoles