El pasado viernes, 20 de mayo, tenía que votarse en Bruselas la propuesta de la Comisión Europea para aplicar el tratamiento de frío a las naranjas importadas de ciertos países terceros, en concreto de aquellos en los que está presente la llamada “falsa polilla”, principalmente Sudáfrica y Zimbabue.

Sin embargo, finalmente este asunto se retiró del orden del día de la reunión del Comité Permanente de las Plantas, Animales, Alimentos y Piensos, formado por los expertos de los Estados miembros, que era el que tenía que votarlo.

El sector cítricola español considera que la Comisión ha cedido ante las presiones de los productores y exportadores sudafricanos.

La interprofesional del sector, Intercitrus, ha enviado una carta a la comisaria de Sanidad para pedir explicaciones. En ella subraya el riesgo fitosanitario que supone la no implantación de esta medida para la prevención de una plaga aún no presente en territorio comunitario y pregunta cómo van a poder cumplir los agricultores europeos con el objetivo de reducir el uso de fitosanitarios si la Unión Europea no les protege de plagas foráneas tan graves como esta.