La autorización actual del glifosato en la Unión Europea expira en diciembre de este año, pero es más que probable que se prorrogue por un año más.

El motivo es que la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria no va a tener listo a tiempo su informe de evaluación del herbicida. Este informe es indispensable para tomar una decisión sobre si se vuelve a autorizar, o no, el uso del glifosato en la Unión Europea. La Autoridad de Seguridad Alimentaria tenía previsto presentarlo en el segundo semestre de este año pero ha anunciado que no lo tendrá listo hasta julio del que viene.

El retraso se debe al elevado número de respuestas recibido durante el período de consulta pública y el importante número de comentarios enviados por los expertos de los Estados miembros, que hay que estudiar.

Esta circunstancia obligará a Bruselas a prorrogar la autorización de esta sustancia al menos para el año 2023.