Frente a los datos manejados por organizaciones vegetarianas sobre el incremento de la demanda de verduras y la caída en la misma en productos de origen animal, un informe de Naciones Unidas para el Medio Ambiente señala un fuerte incremento en la demanda de carnes del 14% para finales de esta década. El organismo justifica este comportamiento de los mercados fundamentalmente por la existencia de una mayor población y una mejoría en los ingresos de los ciudadanos. En los países de ingresos ya elevados, la demanda se estabilizará por los cambios en las preferencias de los consumidores, mientras crecerá en el resto. La avicultura se mantiene como la carne más demandada con el 41% del total frente al 20% que supone el vacuno. En relación con el periodo de 2018 a 2020, se espera que la producción crezca un 5,3% para 2030.