El Ministerio de Agricultura rechazó el recurso presentado por los viticultores extremeños de la zona de Almendralejo contra la propuesta del Consejo Regulador dominado por bodegueros y viticultores catalanes de limitar a solo 0,1 hectáreas el incremento de las superficies del viñedo para el cava en los próximos tres años. Desde este organismo se entiende que el futuro del cava pasa por mantener la producción y elevar la calidad de la oferta, mientras desde otros territorios se entiende que se pueden elevar las ventas en todos los mercados y a la vez apoyar la calidad.

Hoy la superficie para el cava se sitúa en unas 38.000 hectáreas, una cifra estabilizada, de las que más de 30.000 se hallan en Cataluña.