Las organizaciones de las cooperativas de frutas y hortalizas de la Unión Europea, entre las que se encontraba  Cooperativas Agroalimentarias, han planteado a la Comisión la necesidad de eliminar una serie de medidas que suponen trabas para su actividad y para su propia competitividad. En esa dirección reclaman paralizar la reglamentación sobre el uso de los plásticos y el calendario para su aplicación, muy especialmente en España. En la misma línea de defender su competitividad se aboga por suprimir la propuesta para reducir en un 50% el uso de productos fitosanitarios y apoyar el desarrollo de otras alternativas como la lucha biológica en el sector. En conjunto, el sector plantea la imposibilidad de seguir si para las producciones comunitarias se aplican una serie de exigencias que no cumplen las producciones importadas