Las ventas de fertilizantes para uso agrícola se situaron en 2021 ligeramente por debajo de los 5 millones de toneladas y registraron una caída del 2,6% respecto a 2020, según datos del Ministerio de Agricultura. Hay que recordar que en 2021 ya se produjo una subida significativa de los precios de los abonos, aunque mucho menos acusada que la que sobrevino en 2022.

El descenso respecto al año anterior se debió principalmente a una disminución de las ventas agrícolas de fertilizantes complejos (2,098 millones de toneladas, frente a 2,15 millones el año anterior), ya que las de abonos simples se comportaron de forma desigual: estabilidad en las de fertilizantes nitrogenados (2,4 millones de toneladas), caída en los fosfatados (hasta 115.582 toneladas) y leve aumento en los potásicos (hasta 303.417 toneladas).