China podría incrementar sus importaciones de porcino

Su cabaña se había recuperado pero ahora está en descenso

El descenso de la cabaña porcina china parece ser más acusado de lo anunciado por las autoridades del país y se espera que China aumente las compras en el exterior en 2023, según operadores entrevistados por la agencia Reuters.

Tras una fuerte caída de las compras en 2022, las importaciones chinas de carne de porcino podrían volver a aumentar en 2023 debido a la insuficiente producción local, apunta Reuters. La agencia de noticias se basa en testimonios de operadores industriales locales que afirman que las autoridades han subestimado el descenso del número de cabezas de ganado en los últimos meses. Según el Ministerio de Agricultura chino, la cabaña de hembras se situó en septiembre en 43 millones de animales, frente a los 44,6 millones del mismo mes de 2021. El descenso real sería "mayor del comunicado", y "el censo de cerdas habría disminuido entre entre 6 y 8 millones de cabezas", estima Reuters, que cita a la empresa canadiense Genesus, que vende animales reproductores en China.

Las estadísticas facilitadas por las autoridades chinas suelen ser cuestionables. Más allá del carácter políticamente sensible de estas cifras, Reuters recuerda que en China hay "20 millones de pequeños ganaderos que entran y salen con frecuencia de la cría de cerdos en función de las condiciones del mercado". Hay otros indicios que apuntan a que la producción está cayendo: en los ocho primeros meses de 2022, la producción de piensos para cerdos descendió un 8% respecto al mismo período del año pasado, según la asociación que agrupa a la industria china de alimentación animal. A esto hay que añadir la subida del precio del porcino (+51,8% en un año a mes de octubre, según la Oficina Nacional de Estadística).

Según Reuters, "los observadores señalan que sólo la falta de oferta puede provocar precios tan elevados". Este déficit de producción se debe a las importantes pérdidas sufridas por los ganaderos chinos. "Algunos ganaderos redujeron su cabaña reproductora a finales de 2021 y principios de este año, tras meses de precios bajos y costes elevados de los alimentos para el ganado", explica una nota del Mercado Bretón del Porcino (MPB).