La Comisión Europa ha presentado su informe de perspectivas de los mercados agrarios para la próxima década. En el señala que cabe esperar que la producción de algunos cultivos se estanque o disminuya ligeramente en la Unión Europea y que caiga la producción de leche y de carne.

Esa evolución sería consecuencia de los desafíos que está afrontando el sector agrario, en particular la invasión de Ucrania por parte de Rusia (que ha disparado los precios de los insumos y la energía, que ya estaban al alza), el impacto del cambio climático y cambios en las tendencias de consumo.

A pesar de ello, la Unión seguirá siendo autosuficiente en la mayoría de los productos y será capaz de generar excedentes, que contribuirán al suministro mundial de alimentos, en particular de trigo y productos lácteos. Sin embargo, seguirá dependiendo de las importaciones para abastecerse de productos como las frutas tropicales, el arroz y la soja.

En cuanto a la renta de los agricultores y ganaderos, estima que aumentará ligeramente en la próxima década a pesar que los costes de producción mantendrán niveles altos.