La producción española de cereales será este año de 17,4 millones de toneladas, según las últimas estimaciones de los comerciales europeos. Esa cifra supone una caída del 26% respecto a la cosecha del año pasado, a la que contribuyen todos los tipos de grano. Aunque la superficie sembrada, de acuerdo con los datos de los comerciantes, ha sido algo más corta, el descenso debe atribuirse principalmente a la caída de los rendimientos por la falta de lluvias y las elevadas temperaturas de los últimos meses.

A nivel comunitario, COCERAL (que agrupa a los comerciantes europeos de cereales, oleaginosas y ali-mentos para el ganado, entre otros) estima una disminución del 8% en la producción, hasta los 264,5 millones de toneladas, debido también a unos rendimientos más bajos. La caída es especialmente acusada en el caso del maíz, del que se espera un volumen inferior a los 52 millones de toneladas en toda la UE.

Entre los grandes países productores destaca la disminución de la cosecha en Francia, que se situaría en 60,24 millones de toneladas, según los comerciantes, frente a los 66,8 millones de 2021. Sin embargo, en Alemania se mantendrá estable en 42,7 millones de toneladas (42,3 millones el año pasado). En Polonia se estiman 31,8 millones (32,2 millones en 2021), en Rumanía solo 19,5 millones (frente a los 26,8 millones de toneladas del año pasado), en Hungría 9 millones (14 millones en 2021) y en Italia 12 millones (frente a 14 millones en la campaña anterior).

La estimación de COCERAL para nuestro país es algo más corta que la presentada por Cooperativas Agro-alimentarias de España a finales del pasado mes de julio, en la que apuntaba a 18,15 millones de toneladas (-23% respecto a 2021), aunque advertía que la cifra definitiva dependería del final del ciclo del maíz, por las dudas sobre las dotaciones de riego y el impacto de las elevadas temperaturas.