La crisis alimenta la marca blanca

Ya supone casi el 50% de las ventas de alimentación

La inflación elevada y la crisis en los hogares ha disparado la venta de la llamada marca blanca o marca de la distribución, en líneas generales a precios más bajos que la marca de los fabricantes al no soportar, entre otros aspectos, los costes en publicidad, acceder muy directamente a los lineales o estar fabricadas “ por encargo” a una empresa bajo fórmulas de subasta. Al pasado mes de julio la misma había crecido 2,5% puntos sobre el mes de mayo del año anterior, según Nielsen, hasta situarse en el 49,4% de las ventas de gran consumo donde destaca la alimentación, frente al 7,9% de la marca de fabricante. Entre los productos más demandados bajo este sistema se hallan aceite, margarina o matequilla, curiosamente algunos de los que han registrado en origen las mayores subidas en el último año, aceite y leche.