El ministro de Agricultura Luis Planas presentó recientemente los datos sobre la evolución de la demanda de los productos alimentarios en 2021. Entre los muchos datos contenidos en el mismo, en lo que puede ser más de interés para la producción agraria, cabría destacarse lo siguientes aspectos:

Primero, la demanda global sufre un descenso del 5,7% hasta los 32.774 millones de kilos o de litros, mientras el gasto crece solamente un 0,5% hasta los 102.552 millones de euro. Se imponen precios más baratos

Segundo, que en los hogares bajó el gasto un 6,1% hasta los 74.543 millones de euros en valor y el 7,% en el volumen de las compras

Tercero, fuera de los hogares, especialmente en la restauración, la demanda en volumen creció un 10,4% y el gasto incrementó un 2 3,2% hasta los 28.008 millones de euros, pero sin llegar las cifras antes de la pandemia en 2019

Cuarto, el gasto por persona y año pasó de 2.383 a 2.425 euros, pero con importantes diferencias. Mientras en los hogares bajó de 1.718 a 1.610 euros, fuera de los hogares subía de 667 a 814 euros, lo que oficialmente se entiende como la recuperación de la normalidad en la restauración.

De interés para el sector agrario y la industria alimentaria, junto a la menor demanda global y el escaso avance de los precios, sería el avance en la venta de nichos de productos más elaborados, en los ecológicos y alimentaciones especiales como la destinada a los celiacos.