La comercialización de aceite de oliva mantiene un buen ritmo en la presente campaña –con unas salidas de 126.500 toneladas en febrero- pero continúa por debajo de las ventas de la campaña pasada.

Según los últimos datos del Ministerio de Agricultura, en los cinco primeros meses de la actual campaña 2021/22 (octubre-febrero) se comercializaron 636.600 toneladas, un 11,1% menos que en el mismo período de la anterior, aunque la cifra supera en un 1% a la media de las cuatro últimas. Las exportaciones acumuladas se situaban en 394.500 toneladas (-14,5%) y las ventas en el mercado nacional en 242.100 toneladas (-4,9%).

Por el contrario, las importaciones han crecido el 4,2%, hasta las 91.500 toneladas. En cuanto a la producción, hasta finales de febrero se habían obtenido 1,45 millones de toneladas y aún faltan las cantidades menores que se sumen hasta abril-mayo. Las existencias a 28 de febrero eran de 1,33 millones de toneladas.