Las ventas de tractores nuevos registraron un descenso de casi el 15% en 2023 respecto al año anterior y se situaron en 8.688 unidades, según el registro de inscripción de maquinaria agrícola del Ministerio de Agricultura. En 2022 ya se había producido una caída del 11,3%.

Como consecuencia de ese acusado descenso en las ventas de tractores, las ventas totales de maquinaria agrícola disminuyeron el año pasado en un 2,23%, situándose por debajo de las 30.000 unidades. A esa caída contribuyeron también otras máquinas, en particular los equipos de tratamientos y los de aporte de fertilizantes y agua.

Por el contrario, crecieron considerablemente las ventas de máquinas de preparación y trabajo del suelo, equipos para siembra y plantación y equipos de recolección.