El pleno del Parlamento Europeo ha rechazado tajantemente la propuesta de la Comisión Europea sobre el uso sostenible de fitosanitarios. Pide que la retire y presente una nueva.

Se esperaba un resultado muy ajustado en la votación debido a que la Comisión de Medio Ambiente parlamentaria había adoptado una posición que iba más allá de la propuesta inicial de Bruselas. Sin embargo, finalmente una mayoría parlamentaria votó en contra del texto. También rechazó la petición de la ponente parlamentariade devolverlo a la Comisión de Medio Ambiente para revisarlo y presentar otro.

La pelota está ahora en el tejado de los Estados miembros, que tendrán que decidir si ellos continúan examinando el reglamento para presentar su posición al Parlamento de cara a una segunda lectura y otra opción es que la Comisión Europea retire su propuesta y presente una nueva.

Sea como sea no podrá adoptarse ninguna decisión sobre este asunto antes de que acabe la actual legislatura.

Las organizaciones y cooperativas agrarias europeas y las españolas han mostrado su satisfacción por este rechazo parlamentario a unas propuestas que plantean una fuerte reducción del uso de fitosanitarios sin que haya alternativas disponibles, con medidas para las no que se prevé financiación y sin tener en cuenta a los agricultores y su realidad sobre el terreno.