Parece que hay avances en Bruselas hacia la aprobación de un etiquetado más preciso del origen de la miel.

En el seno del Consejo de la UE, parece contar con un amplio apoyo la propuesta de compromiso de la presidencia española para que las mezclas de miel indiquen los países de origen por orden decreciente de su peso en la mezcla y con el porcentaje que representa cada uno.

Por parte del Parlamento Europeo, de momento solo se ha pronunciado la Comisión de Agricultura, que defiende también la indicación de todos los países de origen con el porcentaje de cada uno de ellos en la mezcla. Además, los eurodiputados agrícolas piden la prohibición definitiva del filtrado de la miel y la maduración de la miel dentro de la colmena.

Sin embargo, quedan aún bastantes pasos para que se aprueben esas medidas. Debe pronunciarse todavía la Comisión de Medio Ambiente parlamentaria, que es la que lleva la voz cantante en este asunto, y el pleno del Parlamento Europeo y después empezarían las negociaciones entre éste y el Consejo para llegar a un texto definitivo.