La superficie dedicada al maíz transgénico continúa a la baja en España. Este año se han sembrado unas 46.300 hectáreas, lo que supone una caída del 31,5% respecto a 2022, según la estimación del Ministerio de Agricultura.

En 2023 la superficie de maíz transgénico ha representado el 18,34% de la superficie total dedicada al maíz, que se habría situado en 252.600 hectáreas (-21,9% respecto a 2022), según el último dato del Ministerio. En 2022 el maíz transgénico ocupó el 21,33% de la superficie total y en 2018 rozaba el 36%. El cultivo de maíz transgénico se inició en España en 1998. Desde ese año fue creciendo hasta 2013, cuando se alcanzó una superficie de casi 137.000 hectáreas. A partir del año siguiente la tendencia fue la contraria.

Por comunidades autónomas, las principales productoras de maíz transgénico muestran esa tendencia a la baja. Es el caso de Aragón, que se sitúa ahora por debajo de las 25.000 hectáreas, de Cataluña (con poco más de 10.000) y de Navarra (5.636,74 hectáreas). A pesar de la caída, la superficie de esta variedad representa un elevado porcentaje de la superficie total de maíz en estas regiones: 64,70% en Cataluña y 44% en Aragón y Navarra. Por el contrario, ha aumentado la superficie de maíz OMG en Extremadura (algo más de 4.600 hectáreas, donde representa el 20,7% del total) y ligeramente en Castilla-La Mancha (1.344,47 hectáreas; 8,2% del total).